La ignorancia generalizada de nuestra Historia

Una columna de Israel Morales en El Nuevo Día de hoy me provocó a escribir sobre algo que vengo rumiando hace mucho tiempo: la ignorancia generalizada sobre nuestra historia. Dice Morales:

Hace poco se realizó un grupo focal con jóvenes para conocer sus gustos, sus historias, sus afanes y sus amores. A alguien se le ocurrió preguntar sobre Historia.

Eso no estaba en el libreto. La pregunta cambió el ritmo de las entrevistas y la contestación me alteró el sistema camino a casa. “No puede ser que esto esté pasando”, me decía. La pregunta de marras era: “¿Quién fue Luis Muñoz Marín?” La jovencita contestó muy orgullosa, creyéndose poseedora de la verdad. O al menos de la suya. “Ese fue el dueño del aeropuerto. Claro, el aeropuerto de Isla Verde, Muñoz Marín”. Silencio en la sala. Caras de asombro entre los presentes.

¿Cómo es posible que tanta tecnología encubra tanta ignorancia?, me pregunté. ¿Cómo es posible que haya gente que no conozca siquiera el nombre del primer gobernador electo por los puertorriqueños, que no fue el primer gobernador puertorriqueño, porque ahí entonces cambia el nombre a Jesús T. Piñero?

Uno se pregunta de qué nos vale tener más computadoras último modelo en las escuelas, si los niños y los adolescentes ni siquiera pueden expresar sus sentimientos de una manera coherente, no conocen su historia, no saben lo que son.

Yo me pregunto lo mismo pero el desconocimiento abarca también los adultos, todas las clases sociales y ambos sistemas de enseñanza. Hace poco un maestro de historia en un colegio privado de estudiantes pudientes me comentaba que sus estudiantes llegan (de escuelas privadas) con una ignorancia increíble de la historia de Puerto Rico. Yo no podía creer que solamente uno de sus alumnos sabía quién era Pedro Albizu Campos y era porque sus padres son independentistas. Algunos dijeron que era un compositor, confundiéndolo obviamente con Morel Campos.

Como apasionada de la Historia en general y de la nuestra en particular, hace tiempo me siento frustrada por el poco conocimiento de la Historia de Puerto Rico en este país. No hay más que escuchar los noticieros y entrevistas por radio y televisión para darse uno cuenta de que es un problema generalizado.

¿Cuál es la razón para ese desconocimiento? ¿Falta de interés? ¿Tendrá que ver la mentalidad colonizada de nuestro pueblo que piensa que no tenemos una historia que valga la pena? ¿Será el exceso de estímulos audiovisuales?

Yo me sospecho que, aunque podríamos poner “todas las anteriores”, en el fondo la causa es la forma en que se enseña la Historia de Puerto Rico en la escuela elemental y secundaria, sobre todo en el sistema público. Creo que el currículo debe ser totalmente revisado para adecuarlo a la realidad de nuestros estudiantes. Tienen que prepararse libros y materiales que sean atractivos y tengan lo último en información historiográfica. En los salones donde se enseña esa historia debe haber mapas enormes de la isla, fotos de las mujeres y hombres famosos en nuestro quehacer como pueblo en todos los ámbitos, y recursos audiovisuales que les complementen lo que leen.

En lugar de eso, los maestros de Historia de Puerto Rico en el sistema público se las ven y se las desean tratando de motivar a sus estudiantes. Hace poco conocí a un joven maestro en una escuela secundaria en Bayamón una de cuyas estudiantes quiso entrevistarme para su clase. Quise hablar con él y me relató una situación que no debería ocurrir en ninguna escuela de un país “civilizado”. Me decía que no cuenta con biblioteca, no hay mapas, los libros no sirven y encima cuando llega a su salón tiene que limpiar los pupitres antes de que le lleguen los alumnos porque los encuentra con mojoncitos de ratones. Encima, casi no puede dar clases por el ruido que proviene del tráfico en la avenida frente a su escuela y los tiroteos o el reggaetón en los entierros de gente del residencial que queda detrás de la escuela. Yo pensé que ese joven es un verdadero héroe y me he quedado pensando en cómo pudiera ayudarle. Para mí hubiese sido totamente imposible enseñar en un ambiente como ese y sin embargo es el que prevalece en la gran mayoría de las escuelas públicas del país. Por eso apoyé la huelga de maestros.

La pregunta es, ¿cuándo y quién va a hacer algo por remediar esta situación? ¿Le importa a alguien en las esferas de poder que haya tamaña ignorancia de nuestra Historia?