El 25 de julio de 1898, fecha en que toda la nación española conmemoraba el día de su patrono nacional, el apóstol Santiago, las tropas estadounidenses al mando del General Nelson A. Miles (el asesino de indios) invadieron a Puerto Rico por la bahía de Guánica, al sur de la Isla. Fue el comienzo de una campaña militar que 85 días más tarde culminaría con la salida del último Gobernador de España en la Isla. Así concluyeron casi cuatro siglos de coloniaje español y comenzó el dominio de Estados Unidos sobre Puerto Rico.
El contexto histórico

El hecho de la invasión de 1898 se da en el contexto de la Guerra Hispano-cubano-estadounidense (conocida como Hispanoamericana),que había dado inicio el 19 de abril, dos meses después de la explosión del buque de guerra Maine en la bahía de la Habana. A pesar de que España reiteró no tener culpa del siniestro (lo cual se demostró posteriormente), fue la excusa que buscaba el gobierno de Estados Unidos para sacar a España del Caribe y establecer las bases necesarias para sus planes imperiales. De acuerdo al historiador Ivan Musicant en su libro Empire by Default, la guerra contra España se planificó desde 1895 en el Naval War College de Estados Unidos (poco después de comenzar la guerra de independencia en Cuba). Se habían elaborado tres opciones y se escogió la de un ataque a Cuba y Puerto Rico para obligar a España a pelear lejos de sus bases pero cerca de los Estados Unidos. Puerto Rico siempre se incluyó en los planes a pesar de que la Isla no estaba en guerra contra España. Esto contradice la versión del historiador Carmelo Rosario Natal en su libro sobre esta guerra, a quien cita Francisco A. Scarano en Puerto Rico Cinco siglos de historia.
El pueblo estadounidense fue convencido de que la guerra contra España era necesaria para liberar a Cuba mediante una campaña de mentiras y exageraciones por parte de los dos principales periódicos de entonces que pertenecían a Joseph Pulitzer y a William R. Hearst (el personaje que Orson Wells recrea magistralmente en "Citizen Kane"). Es famosa la frase de Hearst, quien luego de enviar a un fotógrafo a Cuba y recibir la noticia de que no había guerra en esa isla le contestó: "Envíame las fotos y yo produciré la guerra". (104 años después la guerra de Irak fue producida gracias a la ayuda de la prensa televisiva, en particular CNN y Fox News). Pero la verdad fue que liberar a Cuba era una mera excusa y la prueba es que las primeras operaciones navales de la guerra fueron en Filipinas donde hubo la primera victoria para Estados Unidos el 8 de mayo en Cavite.


Hubo combates entre cruceros españoles y estadounidenses a la vista de una multitud trepada en las murallas del Morro (que Angel Rivero describe detalladamente en su Crónica, obra que recomiendo a todos conseguir y leer). El 17 de julio España era derrotada en Santiago de Cuba, el mismo día que se inauguraba el gobierno autonómico en Puerto Rico. Cinco días después de esa derrota el gobierno español inició los trámites para solicitar el Armisticio para terminar la guerra pero los planes para invadir a Puerto Rico siguieron adelante.
Los preparativos
Semanas antes de la invasión, un espía fue enviado a la Isla por órdenes del General Nelson A. Miles, el Comandante en Jefe del Ejército de los Estados Unidos. Se trató del teniente Henry Howard Whitney quien tenía la encomienda de averiguar el lugar más adecuado para el desembarco, la situación militar y el ánimo de los habitantes ante la posible invasión. Whitney logró pasar desapercibido mediante varios disfraces y por su conocimiento del español. Así averiguó algo esencial para el éxito del desembarco y fue que en la parte sur de la Isla había un sentimiento antiespañol muy fuerte. Esto se explica porque la persecución de los autonomistas y los castigos del Componte, concentrados en esa zona, había ocurrido tan sólo once años antes. Whitney se hizo pasar por pescador y llegó hasta Guánica donde pudo constatar inclusive la profundidad de las aguas en la bahía. A su regreso el espía hizo un relato de sus averiguaciones ante el Presidente McKinley, el Secretario de Guerra Alger y el propio Miles. Sin embargo, ya el alto mando del ejército había decidido que el lugar de desembarco iba a ser por Fajardo, en la parte oriental de la Isla.

(El ejército español recibe la bendición en la Plaza las Delicias de Ponce días antes de la invasión. Obra de Carmen Mercedes Vázquez)
El 21 de julio Miles sale para Puerto Rico a bordo del vapor Yale. En medio de la travesía, de acuerdo al relato de Rivero, le envió un mensaje al Capitán Higginson, Comandante de la Marina a bordo del Massachusetts. Le indicaba que debería cambiar la ruta establecida para ir por el sur en lugar del este pues era ya un secreto a voces que iba a ser por Fajardo. Higginson se niega pero Miles insiste y llega al punto de ofrecerle a Whitney para que lo guíe. Finalmente el espía pasa con sus planos al Massachusetts y la flota tomó por el canal de la Mona llegando a la bahía de Guánica la madrugada del 25 de julio de 1898.
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